Microsoft vence a la FTC; Estados Unidos da luz verde a la compra de Activision Blizzard

Tras días de audiencia y una intensa guerra de declaraciones, las autoridades de Estados Unidos ya dieron su veredicto en el caso de la compra de Activision Blizzard y la lucha entre Microsoft y la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC). La jueza Jacqueline Scott Corley escuchó los argumentos de ambas partes y, al final, inclinó la balanza a favor de Microsoft. Así pues, la compañía tiene el camino libre para completar la compra de Activision Blizzard, al menos en Estados Unidos. Se trata de una excelente noticia para la compañía, pues la FTC era uno de los principales detractores del acuerdo.

De acuerdo con los detalles, la jueza le dio la espalda a la FTC, por lo que no aprobará la solicitud de una orden judicial preliminar para frenar la adquisición de Activision Blizzard. Así pues, Microsoft venció al regulador de Estados Unidos. “El Tribunal determina que la FTC no ha demostrado la probabilidad de que prevalezca su reclamo de que esta fusión vertical particular en esta industria específica puede reducir sustancialmente la competencia. Por el contrario, la evidencia del expediente apunta a un mayor acceso de los consumidores a Call of Duty y a otro contenido de Activision. Por lo tanto, se niega la moción de medida cautelar», afirmaron las autoridades.

Si bien la batalla está ganada, la FTC aún tiene la posibilidad de apelar la decisión de la jueza antes de que concluya el día. De no hacerlo, Microsoft tendrá la vía libre para completar la adquisición de Activision Blizzard incluso este mes.

Ahora sólo tiene que arreglar sus asuntos pendientes con la Comisión de Autoridades y Competencia de Reino Unido (CMA), que decidió bloquear la adquisición. En teoría, Microsoft podría completar la compra antes del 18 de julio, la fecha límite que se pactó para cerrar el trato. Sin embargo, para ello tendría que acelerar sus negociaciones con la CMA o, incluso, estar dispuesta a hacer importantes movimientos de negocio en Reino Unido para completar la adquisición a pesar de la oposición del organismo.