Desde su presentación el pasado 2 de abril, Nintendo Switch 2 ha protagonizado miles de conversaciones entre jugadores por el precio de sus videojuegos. Y es que se ha desvelado que títulos como Mario Kart: World o Donkey Kong: Bananza costarán entre 80 y 90 euros en su edición física; dato que ha dado lugar a muchas críticas hacia los padres de Super Mario. Ahora bien, ¿por qué hay aventuras más caras que otras? La Gran N ha respondido a esta pregunta diciendo que «el precio final lo determinan los minoristas. En el caso de My Nintendo Store, lo determinamos caso a caso». Y, para profundizar aún más en los motivos detrás de este sistema, un jefe de la compañía ha ofrecido una explicación más detallada.
Hablamos de Doug Bowser, presidente de Nintendo of America y quien ha concedido una entrevista a The Washington Post para abordar este aspecto tan criticado en los títulos de Nintendo Switch 2. «Lo que ves es un precio variable», comenta el profesional. «Miramos cada juego, nos fijamos en el desarrollo que se ha invertido en el juego, la amplitud y profundidad de la jugabilidad, por así decirlo, la durabilidad a lo largo del tiempo y la repetibilidad de las experiencias de juego».
«Todo eso son factores, y hay muchos más que influyen en [decidir] cuál es el precio adecuado para el juego. Así que creo que se puede prever que habrá precios variables, y no hemos establecido un punto de referencia». En este sentido, Bowser recuerda que la generación de Nintendo Switch también vivió una situación similar: si bien es cierto que títulos como Zelda: Tears of the Kingdom se vendieron a 69,99 euros, otros como Link’s Awakening tuvieron un precio de 59,99 euros.