La industria gaming es muy cambiante, y las necesidades de las compañías ya no son las mismas que hace muchos años. Los juegos para móviles, los títulos como servicio y el riesgo de no rentabilizar un triple A también han afectado a Square Enix, que ha perdido 2.000 millones de dólares en bolsa desde el lanzamiento de Final Fantasy XVI.
La compañía japonesa tiene un plan para aumentar la rentabilidad, y el nuevo presidente de Square Enix, Takashi Kiryu, lo ha explicado. Actualmente el negocio de la empresa se divide de la siguiente manera: Juegos HD, MMO y títulos para dispositivos móviles. En una sesión de preguntas y respuestas, el mandamás de la entidad ha señalado que estaba «examinando actualmente» su cartera de juegos de alta definición.
«Veo un amplio margen de mejora en nuestro margen de beneficios operativos y me gustaría empezar trabajando principalmente en nuestros juegos de alta definición. En lugar de intentar crear únicamente nuevas IP, tenemos la intención de adoptar un enfoque matizado de la inversión por el que también identifiquemos las IP existentes con potencial para ser elevadas a la categoría AAA, teniendo en cuenta también el retorno de la inversión», explica Kiryu (vía VGC).