Halo Infinite era considerado como el título que habría de cargar sobre sus hombros con la actual generación de Xbox. La oportunidad era única: el 20 aniversario, una nueva consola, un concepto renovado. Lamentablemente, las cosas no salieron como se esperaban y 343 Industries demostró que sigue sin tener control de la franquicia, situación que ha llevado a pensar en un cambio de estudio y tal parece que a Microsoft no le desagrada la idea.
Durante una entrevista amplia con Axios, Matt Booty, jefe de Xbox Game Studios, fue cuestionado sobre la posibilidad de que tras lo sucedido con Halo Infinite Microsoft encargara la franquicia a otro estudio, en particular a alguno de Activision dado lo que han hecho con Call of Duty y ante la inminente aprobación de la compra. Al respecto, el directivo no negó la posibilidad pero dejó claro que es una situación que no dependería de Microsoft, sino de los proyectos y planes de los equipos de Xbox Game Studios: «si algo así sucediera, tendría que venir de los estudios. Es poco probable que entremos y dictemos eso desde arriba».
Asimismo, Matt Booty destacó el impulso que está dando Microsoft para el trabajo en equipo dentro de Xbox Game Studios con equipos apoyando proyectos de desarrollo: «optimizamos la producción creativa, que puede tener algunos pros y contras, claro, pero ese es el objetivo». Posteriormente, el jefe de Xbox Game Studios mencionó que tiene confianza en el equipo actual de Halo Infinite aunque aseguró que los cambios seguirán pensando en el futuro del juego a corto y mediano plazo: «confío en el equipo de liderazgo, pero el equipo que nos trajo aquí probablemente no sea el mismo equipo que nos llevará hacia adelante».