Like a Dragon: Pirate Yakuza in Hawaii es un nuevo capítulo de la saga Like a Dragon que sigue la tradición de ofrecer títulos con una frecuencia anual. En esta ocasión, el estudio Ryu Ga Gotoku nos lleva a un nuevo spin-off que nos transporta a Hawái, lugar conocido por Like a Dragon: Infinite Wealth. Esta vez, no vemos a Ichiban Kasuga ni a Kiryu Kazuma, sino que tomamos el control de Majima Goro, un personaje muy querido por los fanáticos de la saga. La trama comienza pocos meses después de los eventos de Like a Dragon: Infinite Wealth. Nos ponemos en la piel de Majima Goro, quien sufre un naufragio y pierde la memoria. A lo largo de la historia, descubrimos que se encuentra en la isla Rich, donde comienza a conocer a nuevos personajes, como Noah, un joven acompañado de su tigre, Goro.
Los eventos se desarrollan en un contexto de piratas y yakuzas, lo que lleva a Majima a embarcarse en una aventura para recuperar su identidad y enfrentarse a diferentes desafíos. El juego combina exploración, combates y contenido secundario con una fuerte influencia de la temática pirata. Aunque la narrativa incluye giros clásicos como la amnesia de Majima, el objetivo es justificar el aprendizaje de nuevas habilidades y facilitar la integración de nuevos jugadores a la saga. A medida que avanzamos, se nos presentan dos estilos de combate principales: Perro Enfurecido: Estilo rápido y centrado en combos aéreos con dagas, manos y pies. Lobo de Mar: Estilo más centrado en la temática pirata, con espadas, pistola y gancho, ideal para enfrentamientos masivos. Ambos estilos permiten adaptarse a diferentes situaciones y tienen habilidades finales espectaculares, lo que ofrece una experiencia dinámica durante los combates.
El juego no escatima en contenido adicional. Las actividades secundarias incluyen: Piratas y lucha contra enemigos: Derrotar a diferentes tenientes piratas y completar misiones secundarias que implican peleas, caza de tesoros y enfrentamientos con bandos rivales. Mini-juegos: Entre ellos destacan «Crazy Deliveries» (inspirado en Crazy Taxi), «Déglingo Photo» (similar a Pokemon Snap), y el regreso de Dragon Kart. También se pueden disfrutar juegos como golf, béisbol y pinball. Además, existe un Pirates’ Coliseum, donde los jugadores pueden competir en combates navales seguidos de abordajes, una de las características más interesantes del contenido adicional. Like a Dragon: Pirate Yakuza in Hawaii ofrece un mundo amplio que incluye varias islas, como Rich Island, Nele Island, y Madlantis, que está lleno de piratas. Las islas están repletas de actividades, como tesoros, bandidos buscados y tripulantes que se pueden reclutar.
El mapa está bien diseñado, y la exploración invita a los jugadores a dedicarse a completar el contenido adicional, lo que puede extender fácilmente las horas de juego de 30 a 40, alcanzando incluso las 50 si se busca el 100%. Los combates en tierra siguen el estilo beat ‘em up clásico, lo que será familiar para los fanáticos de los spin-offs anteriores. Sin embargo, los combates navales, aunque divertidos al principio, no son tan profundos. El sistema de combate de los barcos es muy arcade, con un uso de impulso y freno para maniobrar y cañones automáticos que apuntan a los enemigos. Aunque es satisfactorio, no llega a la calidad de títulos como Assassin’s Creed IV: Black Flag. La personalización juega un papel importante tanto en el barco como en Majima. Los jugadores pueden modificar el diseño del barco, con opciones para personalizar la figura de proa, las velas y la apariencia general.
Además, Majima puede modificar su vestimenta, corte de cabello y accesorios, lo que añade un toque personalizable a la experiencia. En cuanto al apartado técnico, el juego sigue utilizando un motor gráfico algo anticuado, similar al de Like a Dragon: Infinite Wealth. Aunque no es un gran impedimento, las texturas y animaciones se sienten algo rígidas y las cargas de pantalla pueden ser un poco lentas. Sin embargo, no afecta gravemente la jugabilidad, y el juego sigue siendo disfrutable para los fans de la saga.
