High on Life es el mejor estreno de la historia en Game Pass en 2022, el más exitoso de entre todos los third party y el mejor lanzamiento de un título para un jugador de la historia del servicio. Ese hito tan increíble ha hecho que el juego de Squanch Games, el estudio del creador de Rick y Morty, esté siendo uno de los títulos más populares del momento en redes sociales e internet.
El propio Justin Roiland ha acudido al podcast oficial de Xbox, presentado por Larry Hryb. En él, el creativo es preguntado por varias de las incógnitas que tenemos sobre el servicio Xbox Game Pass, así como por detalles concretos del desarrollo de High on Life. Una gran oportunidad para conocer a alguien que lidera el estudio, sus proyectos, y además pone voz a Kenny, una de las pistolas gatlian protagonistas… Además de ser el responsable de Rick y Morty, claro.
Game Pass es un servicio que ha cambiado la forma de consumir videojuegos, pero que no siempre tenemos clara la relación de este con las ventas de los títulos presentes en su catálogo. Roiland también pensaba así, razón por la que empezó a hablar con otros estudios: «Antes de decidirnos, hablé con un puñado de gente de otros estudios que tenían Game Pass. Y al final llegué a la conclusión, basándome en lo que había oído, de que es un valor añadido. Porque, en esencia, hay mucha gente que de otro modo no habría probado el juego.»
Esos usuarios pasan a estar receptivos al título, y lo prueban cuando de normal quizás no estarían interesados. Eso acaba por conseguir un efecto de boca a boca, según Roiland: «Si crees en lo que has hecho y te sientes completamente seguro de que has creado algo especial o diferente, como nos pasa con nuestro juego, esa gente puede convertirse en evangelizadora del título».
Pero quedaba por ver un asunto, quizás el más relevante como son los ingresos. Y ahí se llevó una sorpresa: «Si realmente crees que has hecho algo que merece la pena, es una herramienta muy poderosa. Y eso es lo que deduje al investigarlo por mi cuenta. Mucha gente me dijo que las ventas de los juegos que no están en Game Pass se multiplican por 7».