Durante décadas, los juegos exclusivos han sido el alma de las consolas, proporcionando identidad a plataformas como Nintendo, PlayStation o Xbox. Normalmente los jugadores eligen qué hardware comprar en función de estos títulos, pero la industria ha cambiado en los últimos años debido a la crisis y a los altos costes de desarrollo, lo que obliga a las compañías a aumentar los márgenes de beneficio vendiendo millones de unidades.
En Xbox ya estamos vislumbrando que su futuro es multiplataforma, pero el caso de Final Fantasy VII Rebirth ha cambiado el rumbo de Square Enix. El JRPG se lanzó en exclusiva para PS5 a principios del año pasado y, a pesar de vender millones de unidades, fue insuficiente para las altas expectativas de la compañía japonesa. De este modo, hace unas semanas FF VII Rebirth se lanzó en PC y hemos visto que ha sido un rotundo éxito, calificando su estreno como «fantástico».
Si bien Square Enix ha dejado claro que su futuro es multiplataforma, el popular periodista de Bloomberg, Jason Schreier, ha reaccionado al éxito de Final Fantasy VII Rebirh en PC a través de BlueSky afirmando que las exclusividades de consolas van camino de desaparecer, en especial si se trata de compañías third parties. «Las exclusivas de consola pronto quedarán obsoletas, sobre todo para los editores de terceros», señala. Nintendo continuará presumiendo de exclusivos, Xbox ya ha comenzado a ser multiplataforma y no sería de extrañar que en la próxima generación PlayStation se plantee lanzar sus exclusivos en PC de forma simultánea debido a los altos costes de desarrollo.