Turtle Rock Studios se convirtió en la década de 2000 en uno de los estudios estadounidenses más prometedores del medio. Con su trabajo en Counter-Strike y su salto a Left 4 Dead, ambos co-desarrollados con Valve, los norteamericanos parecían tener un futuro asegurado. Sin embargo, ese camino se truncó en la década pasada. Ahora, tras el revés que supuso Back 4 Blood, Turtle Rock apunta a resarcirse, y varios rumores señalan que están trabajando en una secuela de este último juego.
Si bien es cierto que Turtle Rock encontró su talón de Aquiles con Evolve en 2015, un proyecto que se lanzó con resultados muy por debajo de lo esperado y que dio lugar a una reedición llamada Evolve Stage 2, el cierre de sus servidores marcó su destino. Por ello, el lanzamiento de Back 4 Blood, un juego que parecía emular las primeras obras del estudio bajo el sello de Valve, se convirtió en uno de los más esperados de su año. Aunque consiguió buenos números y varias nominaciones al GOTY en la categoría de «Mejor multijugador de 2021», el título no logró alcanzar las expectativas y su fracaso fue sonoro.