Tras una larga espera, Final Fantasy XVI, la más reciente entrega principal de la popular franquicia de Square Enix, debutó a finales de junio con bombo y platillo. A pesar de su excelente recepción por parte de la crítica especializada y muchos jugadores, sus ventas iniciales hicieron que los fanáticos se rascaran la cabeza y pusieran en duda su éxito. El pasado 28 de junio, la compañía japonesa reveló que el JRPG de fantasía despachó 3 millones de unidades en todo el mundo en menos de una semana. Aunque es una cifra impresionante, quedó por detrás de las 5 millones de copias vendidas que consiguió la entrega anterior en su estreno en 2016.
Ahora, datos de ventas actualizados arrojan luz sobre el rendimiento comercial que gozó el videojuego producido por Naoki Yoshida en sus primeras semanas en el mercado. ¿Es un éxito o un fracaso? Esa pregunta ya generó un caluroso debate en redes sociales entre los fanáticos y detractores del proyecto. De acuerdo con la información, Final Fantasy XVI debutó en la primera posición en Reino Unido, pero sus ventas físicas fueron 74% peores en comparación con las ventas iniciales de Final Fantasy XV en 2016. Además, las ventas cayeron 78% en la siguiente semana. Vale la pena señalar que esas cifras no contemplan las copias digitales.
Algo similar ocurrió en Japón. De acuerdo con datos de la revista Famitsu, el JRPG protagonizado por Clive Rosfield despachó 336,027 unidades físicas en su primera semana, pero sólo 37,763 en la segunda. Esto representa una caída aproximada de 88%. De nuevo, estos datos no toman en cuenta las ventas en formato digital. Con estas cifras sobre la mesa, parece que FF XVI tuvo un peor inicio que las entregas anteriores de la franquicia en suelo japonés. Por ejemplo, Final Fantasy XV vendió 716, 649 copias físicas en 2016, mientras que Final Fantasy VII Remake hizo lo propio con 702 853 unidades en 2020.
Los detractores del videojuego de Square Enix utilizaron estos datos para afirmar que el más reciente exclusivo de PlayStation 5 es un fracaso comercial, al menos en comparación con los títulos previos de la IP. Los defensores, sin embargo, indican que la base de usuarios del PS5 es notablemente inferior a la de PS4. También se apresuran a remarcar que, por ejemplo, Final Fantasy XV también debutó para PlayStation 4 y Xbox One. Por último, argumentan que cada vez son más los jugadores que prefieren comprar sus títulos en formato digital. Lo cierto es que es difícil dictaminar con total certeza si el JRPG es un éxito o un fracaso, pues se desconoce las expectativas de ventas de la compañía. Eso sí, hace unas semanas surgió un reporte que indicaba que, supuestamente, Square Enix estaba preocupada por el bajo número de preórdenes.